La diputada nacional puede ser candidata a senadora, pero es la madre de los hijos. El secretario es el hombre de los secretos de Quintela. Todo tiene un final que puede ser este año o dentro de cuatro años. Quién dará le dará la tranquilidad cuando ya no esté
La gestión de Ricardo Quintela no es similar a otras debido que a nivel nacional todo hace indicar que habrá cambios bruscos, no solo del partido gobernante sino también de la cuestión economica en un país fundido. Hoy la deuda en pesos asusta a propios y extraños y además la inflación se encamina a ser similar a la del año pasado: casi 100%.
Al hacer futurología, el gobernador puede salir airoso el 7 de mayo, el día de las elecciones provinciales, y después qué. La Rioja no genera absolutamente nada por encima de lo que se quiera dibujar. El decreto del litio es un espanta inversiones privadas, ya que el mundo está en contra de la estatización.

Hoy la Provincia recibe unos $15 mil millones para chayar. Es dinero en efectivo, pero eso hasta cuándo va a suceder. Es la pregunta que más suena en los bunker de los referentes nacionales.
Hasta un propio presidente kirchnerista tendrá que hacer grandes retoques para que el país no impacte con la triste realidad. Hoy todo se patea para no enfrentar los problemas, aunque en algún momento habrá que pagar las deudas.
El Gobierno dejó la gestión para centrarse en las elecciones con el propósito de salvar los «trapos». Ven que el final del kirchnerismo está a la vuelta de la esquina y además al mandatario riojano lo dejaron solo en sus luchas contra el «centralismo», la justicia y otras yerbas.

Quintela debe mirar más allá del 10 de diciembre de 2023 porque sabe que el país tendrá otros aires y seguramente, La Rioja puede ser el conejito de India. La sociedad tomó como propia la pregunta ¿A dónde está la plata? y es lo que también se instaló en el circulo rojo en Buenos Aires. Millones y millones que llegan y no se ven en la calle.
Por eso, surge otro interrogante ¿quién le cuidará la espalda a Quintela? En algún momento se irá de la Casa de Gobierno. Tanto Javier Milei, Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta han coincidido en la pregunta de la sociedad riojana.
Quién le da tranquilidad al gobernador. Será la madre de sus hijos, la diputada nacional Gabriela Pedrali (que una oficina gubernamental la ubica como senadora), o el hombre de los secretos, el secretario general de la Gobernación, Armando Molina. Florencia López quedó a la vista de todos que no. Teresita Madera es la misma que se bajó del auto de Luis Beder Herrera cuando iban armar la fórmula. Y Fernando Rejal es el chileciteño del otorgamiento de los permisos mineros, hoy dados de baja.