La federación exigió a la justicia de La Rioja el cese del hostigamiento a la trabajadora de prensa en resguardo de la libertad de expresión y las garantías constitucionales
La Secretaría de Género de la Federación Argentina de Trabajadores de Prensa (FATPREN) expresó «su preocupación frente al acoso que vuelve a sufrir la trabajadora de prensa Manuela Calvo en curso de la investigación de vulneración de derechos de una niña».
En el marco del “Caso cosquillitas” la periodista «fue conminada por el progenitor de la niña a retirar de sus cuentas todas las publicaciones sobre el tema y a retractarse de su contenido bajo amenaza de requerir su detención en virtud de sus “peligrosos antecedentes”, en referencia a la actuación de la justicia riojana que allanó su domicilio y la censuró en el “Caso Arcoiris”, dice un parte de prensa.
Frente a esta intimidación, la FATPREN se solidarizó «con Manuela y advierte una vez más sobre las presiones que grupos antiderechos ejercen hacia periodistas que trabajan con perspectiva de género. Exigimos a la justicia de La Rioja el cese del hostigamiento a la trabajadora de prensa en resguardo de la libertad de expresión y las garantías constitucionales», agregó.
La página de Eduardo German 