El salario de bolsillo de los empleados públicos de febrero -que todavía no se percibió- hoy están a $50 mil de la línea de pobreza de noviembre al comparar las declaraciones de Jorge Quintero, ministro de Hacienda, con los datos de la canasta básica total del INDEC.
El pasado viernes el gobernador Ricardo Quintela anunció un incremento que se percibirá con los sueldos de enero en febrero y una recategorización masiva.
El gobernador determinó en el mes de enero el primer aumento, con un 15% al básico que impacta en antiguedad, presentismo y $17 mil en una suma fija.
Según el ministro de Hacienda, «implicará un incremento de 22.400 pesos en la categoría más baja» y precisó que «el salario mínimo de bolsillo será de $96 mil».
Hay que recordar que actualmente el sueldo mínimo estatal es de $69.500.

Según el INDEC, una familia de cuatro integrantes necesitó $145.948 para superar el umbral de pobreza en noviembre de 2022.

El dato: El salario promedio de $96 mil será en febrero y la línea para no ser pobre en noviembre fue de $145.948. La diferencia hoy es de $49.948 sin cobrarse el sueldo con aumento.
Por otra parte, Quintela informó que el personal contratado y los titulares becas y tutorías -incluidos los PEM- recibirán un aumento de $17.000.
El mandatario aclaró que el aumento salarial no incluye al personal docente ya que el sector tiene su propia paritaria y se seguirán negociando en ese ámbito.